¿Eres adicto a las lagartijas?
Todos saben que son un ejercicio efectivo y relativamente sencillo. Y por eso resulta raro que falten en una rutina de actividad física.
Aquí verás algunas opciones que existen para hacer lagartijas de otro modo, y como una manera de escapar de los caminos trillados, dándole más variedad a tu ejercicio.
Diamante y otras
La llamada lagartija diamante consiste en que desde la posición de lagartija, se juntan las manos y se forma un triángulo con los dedos pulgares e índices, a la vez que se flexionan los brazos dando forma a un diamante o rombo. Es preciso cuidar, al momento de bajar, el control de movimiento de los codos hacia atrás y evitar abrir en exceso los brazos hacia afuera.
La segunda opción es la lagartija con laterales y flexión. En esta forma se colocan las manos casi a la altura de los hombros, se flexionan los brazos y se vuelve girando el torso en diagonal, al mismo tiempo que se levanta el brazo.
La tercera opción es la lagartija con manos abiertas. Para ello, hay que colocar las manos abiertas lo más afuera posible de la altura de los hombros. Luego se baja concentrado la fuerza en el pecho y los brazos.
Por último, la cuarta opción es la lagartija con silla. Aquí se trata de colocar los pies sobre el asiento de una silla de cualquier tipo. A la vez, se ubican las manos fuera de la altura de los hombros. Y se desciende procurando hacerlo hasta el punto máximo.
Beneficios de las lagartijas
Los principales músculos que entran en acción con las lagartijas son el pectoral mayor, el deltoides y los tríceps.
Así mismo, con este ejercicio se consigue un completo trabajo del abdomen. También mejoran la postural de la columna, y se potencia la fuerza de los brazos y la espalda.
Como todo ejercicio, debe ser realizarse bajo la supervisión de un experto que indicará cuándo comenzar y cuándo ir incrementando las repeticiones.
Aclaración:
Todos los conceptos incluidos en este artículo tienen solo carácter divulgativo y no pueden ser considerados como recomendaciones personales.
Antes de poner en práctica lo que aquí se indica, es siempre imprescindible la visita a un profesional.
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