Un adulto sano debería dormir entre 7 y 9 horas diarias con un sueño ininterrumpido y de buena calidad.
Pero, los problemas del sueño están siendo cada vez más frecuentes en la población. Estos pueden verse generados por los horarios que mantenemos hoy en día, las actividades, tareas, trabajo, etc.
Tener una mala calidad del sueño está cada vez más asociado al mal funcionamiento cognitivo, falta de motivación, enfermedades inmunológicas, respiratiorias, cardiovasculares y metabólicas, y mal rendimiento deportivo.
¿Cómo ayudar a lograr una buena calidad del sueño?
Comidas:
· evitar hacer cenas de gran volumen y difícil digestión.
· evitar estimulantes y condimentos fuertes horas previas de acostarse.
· evitar alimentos que produzcan flatulencias, acidez o reflujo.
· eitar alimentos que tengan propiedades diuréticas.
· no levantarse por la noche a picotear.
Rutinas saludables:
· mantener horarios programados para acostarse y levantarse.
· evitar pantallas de celulares, tv, computadoras antes de irte a dormir.
· ambiente oscuro, sin temperaturas extremas y lo más silencioso posible.
· utilizar colchones y almohadas cómodas.
· evitar la luz de los dispositivos electrónicos si te despertás por la noche.
· se recomiendan mucho las meditaciones guiadas.
Siesta:
Si hay problemas de sueño o falta de horarios para dormir por la noche, utilizar las
siestas como recurso.
Ejercicio físico:
Hacer ejercicio durante el día y de forma regular mejora la calidad del sueño. Es recomendable generar una rutina indivdualizada, ya que cada persona puede tener cierta tolerancia a algunos de estos aspectos, y otras a otros.